El Palacio de la Alambra con sus fuentes, sus jardines, sus torres y sus puertas, es el gran monumento de la arquitectura nazarí, situado en la coronación de las estribaciones de Sierra Nevada, frente a los barrios del Albaicín y de la Alcazaba y a sus pies está recorrido por el río Darro. Son famosos atardeceres causan sensación.

Alhambra de Granada. Vista de los palacios nazaries, con las cumbres nevadas de Sierra Nevada al fondo.
La Alhambra de Granada es dentro del estilo islámico nazarí como la Mezquita de Córdoba para el arte califal en Al-Andalus, es decir verdadero paradigma y símbolo.
La Alhambra es una verdadera ciudad-palacio de la dinastía nazarí que tras la batalla de las Navas de Tolosa (1212) y el decaimiento del poder almohade, toma el control del reino de Granada por manos de Bel Alhamar o Mohamed I (1238).
A lo largo de los siglos XIV y XV los soberanos granadinos Mohamed I, Yusuf I y Mohamed V, fundamentalmente en el siglo XIV erigieron esta obra cumbre del refinamiento musulmán de Al-Andalus en la colina de al-Hamra.

Mudéjar arco en el Patio del Cuarto Dorado, con la fachada del Palacio de Comares en la Alhambra, Granada
Hay tres patios de ejes paralelos en la Alhambra: el Patio de Machuca, el del cuarto Dorado y el de Comares (también conocido como de los Arrayanes o de la Alberca).

El Patio de Comares es de grandes dimensiones con arquerías en sus lados menores y paredes lisas laterales con puertas y ventana ajimezadas con paños de escayola encuadrados por alfices, con sebka y atauriques.

La Sala de Comares. El torreón de Comares es exteriormente un sobrio baluarte defensivo de gruesos muros que,alberga la delicada sala de Comares o de los Embajadores. Es una sala cuadrada con cúpula de madera de cedro de simbolismo cósmico. En sus lados menos en el de acceso se crearon a su vez tres habitaciones practicadas en los gruesos muros de la torre. Una de ellas se considera el solio del sultán Yusuf I.

Patio de los Leones y las salas privadas de la Alambra. El patio de los leones, obra de 1377 (Mohamed V), pertenece al ámbito privado de la Casa Real Vieja de la Alhambra. Es un recinto rectangular con dos pabellones adelantados en sus lados cortos. Es probablemente el espacio más afamado de la Alhambra gracias a su fuente central con doce leones del siglo X rodeada con galerías decoradas con estucos y estalactitas soportadas por delicadísimas columnas de mármol.
Detrás de las galerías del lado oeste está la sala de los mocárabes y del lado opuesto está la sala de los Reyes (con pinturas antropomorfas de los diez reyes nazaríes en sus bóvedas). En el lado sur está la sala de Abencerrajes de forma cuadrada con cúpula decorada con de ricos mocárabes de yeso y tambor estrellado. No muy diferente es la cercana sala de las Dos Hermanas.

Patio de los Arrayanes. Alhambra de Granada
Alcazaba. Se trata de la antigua fortaleza del siglo XIII cuyas murallas rodean la Alhambra y esta formada por gruesos muros con más de 20 torres salientes (machuca, Comares, Peinador de la Reina...)
El Generalife. Fue construido por Mohamed VII fuera del recinto de la Alhambra como finca agropecuaria emplazada en una de las laderas del cercano Cerro del Sol.
Las dependencias del Generalife se establecían alrededor del famoso patio o jardín de la Acequia. Al norte de este patio se conserva el núcleo palatino más importante del Generalife. Se abre mediante pórtico de cinco arcos, más ancho el central y contiene dos alcobas laterales y torre interior.
Espero que os guste la recopilación de información e imágenes que he recogido de la Alhambra de granada, para confeccionar este trabajo de la Alhambra de Granada.
ALHAMBRA DE GRANADA

La Alhambra es una ciudad palatina andalusí situada en Granada, España. Formada por un conjunto de palacios, jardines y fortaleza (alcázar o al-qasr القصر) que albergaba una verdadera ciudadela dentro de la propia ciudad de Granada, que servía como alojamiento al monarca y a la corte del Reino nazarí de Granada. Su verdadero atractivo, como en otras obras musulmanas de la época, no sólo radica en los interiores, cuya decoración está entre las cumbres del arte andalusí, sino también en su localización y adaptación, generando un paisaje nuevo pero totalmente integrado con la naturaleza preexistente. En 2011 se convirtió en el monumento más visitado de España, recibiendo la cifra histórica de 2 310 764 visitantes.2
Etimológicamente, «Alhambra» en árabe es «al-Ħamrā» (اَلْحَمْرَاء, 'la Roja'), procedente del nombre completo «al-Qal'a al-hamra» ('fortaleza roja'). En su evolución, el castellano intercala entre la m y la r una b, como en «alfombra», que en el árabe clásico tenía el significado de 'rojez', escrito como «al-humra». Existen más teorías para explicar el origen del nombre de la Alhambra, pues hay otros autores que arguyen que en la época andalusí la Alhambra estaba encalada y su color era blanco. El nombre de «roja» le vendría porque cuando se construyó se trabajaba de noche, y vista por la noche, desde lejos, debido a la luz de las antorchas, se veía roja. Otros autores defienden que «Alhambra» es simplemente el nombre en femenino de su fundador, Abu al-Ahmar (Muhammad I reinado 1238-1273), que en árabe significa 'el Rojo', por ser pelirrojo.
Historia, emplazamiento y accesos a la Alhambra

La Alhambra se levanta sobre la colina de la Sabika, uno de los puntos más elevados de la ciudad de Granada. Este emplazamiento buscaba una situación estratégica defensiva y a la vez transmitir un claro símbolo, donde la cima del poder es muy perceptible para el resto de la ciudad, una ubicación escogida para ser contemplado.3 La ocupación de esta colina se remonta a tiempos romanos. Del año 899 datan las primeras referencias escritas de un emplazamiento militar en la zona. A mediados del siglo XI, al convertirse Granada en capital del reino de Taifa, bajo la dinastía ziríes, se ampliaron las construcciones.
La Alhambra pasó a ser residencia real, a partir de 1238, con la llegada al poder de Muhammad ibn Nasr, primer monarca del Reino nazarí de Granada, para lo que creó un abastecimiento de agua propio. Las construcciones más lujosas de los palacios que hoy se conservan, el palacio de Comares y de los Leones, proceden del siglo XIV. El conjunto tiene una forma alargada e irregular adaptada a la forma de la colina sobre la que se levanta. Su longitud es de 740 m. y su anchura varía entre los 180 y los 40 metros.4
Puertas
Las diferentes vías de acceso al recinto son:3
Accesos nazaríes
- Puerta de las Armas. Es la más antigua de las entradas de la Alhambra, a la que se llega desde la orilla del Darro, bordeando la torre de la Vela y terminando debajo de la torre de las Armas, en la parte norte del recinto.
- Un segundo acceso que también existía desde época nazarí es a través de la Cuesta de los Chinos, al final del paseo de los Tristes, que conducía a la Puerta del Arrabal bajo la torre del mismo nombre, también al norte.
- Puerta de la Explanada o de la Justicia que llegaba hasta la puerta del Vino, entrada por la medina baja, situada al sur. Es de época de Yusuf I, 1348. En el centro puede verse el relieve de una mano y sobre el 2º arco, el relieve de una llave.
- Puerta de las Albercas (siete suelos) que daba acceso a la parte alta de la medina.

Puerta de las Granadas. La puerta de las Granadas o arco de las Granadas es la puerta histórica más bella y popular para acceder a través del Bosque de la Alhambra al entorno del palacio nazarí que es la Alhambra, situada en la ciudad de Granada, comunidad autónoma de Andalucía, España. Construcción a modo de arco triunfal romano, con fachada delantera de un clasicismo muy puro, convirtiéndose en la entrada principal del recinto amurallado en detrimento de la Puerta de las Armas de origen islámico...
Época cristiana
- En tiempos de Carlos V se levanta la Puerta de las Granadas, que da acceso a la cuesta de Gomérez y de ahí a la Puerta de la Explanada. subiendo desde plaza Nueva. Se desemboca en una explanada llamada Plaza de los Aljibes, por estar encima de una serie de aljibes. A la derecha está la Puerta del Vino, es uno de los edificios más antiguos, siendo atribuida su edificación a la época del Sultán Muhammand III (1302-1309), la decoración de la fachada o portada de poniente corresponde a la época finales del siglo XIII o principios del siglo XIV, y la de levante es posterior a 1367, y que comunica la Alcazaba con la zona de palacios.
- Puerta de los Carros. Puerta de Los Carros, acceso principal a la zona baja del conjunto monumental de La Alhambra. Esta puerta data de los años 1526 - 1536, y fue realizada debido a las obras llevadas a cabo para la realización del Palacio de Carlos V, con lo cual no se trata de una puerta de origen nazarí.

La puerta de los Carros no solo daba acceso peatonal al conjunto de los palacios nazaríes, si no que se utilizaba para que los carros tuvieran acceso al conjunto palaciego, de ahí deriva su nombre.

Puerta de la Justicia.
Acceso actual. El actual acceso al recinto de la Alhambra se realiza desde 1988 a través de la red viaria exterior, próxima al actual cementerio, para eliminar el tráfico perjudicial por los accesos tradicionales.
Descripción de los edificios


Plano de la Alhambra de Granada
Alcazaba

Vista exterior de la Alcazaba de la Alhambra desde el norte. A la derecha se levanta la torre de la Vela, a su izquierda más bajas se distingue la torre de Armas y a la izquierda destaca por sus dimensiones la torre del Homenaje y delante de ella la torre del Cubo.
La alcazaba es el recinto situado en la parte más occidental del cerro de Sabika, constituía la zona militar, centro de la defensa y vigilancia del recinto y con ello fue la parte de construcción más antigua de la Alhambra. Las primeras edificaciones árabes realizadas se corresponden con la época califal, en el siglo XI, ampliándose las mismas al convertirse Granada en capital de uno de los reinos de Taifas. Con Muhammad I, primer rey nazari de Granada, se reconstruyó y amplió esta fortaleza, se reforzaron sus muros y se levantaron las principales torres. Su sucesor Muhammad II terminó la obras de reconstrucción de la alcazaba. Con anterioridad a la edificación de los palacios nazaries, esta área compartía también una función de alojamiento real. La alcazaba tiene una forma trapezoidal, su lasus elementos principales son:
Norte: avanzando de derecha a izquierda
- Terraza de la Torre del Cubo. Torre semicircular, construida alrededor de 1586, sobre una puerta islámica, fue vaciada en el siglo XX. Hoy en día constituye una terraza de privilegio para la contemplación del valle del Darro y el Albaicín.
- Adarve de la muralla norte.
- Plaza de Armas y terraza o torre de la plaza de Armas. A finales del siglo XIV Ismail I levantó una puerta bajo esta torre, para las subidas desde Granada, lo que supuso una reestructuración de la zona norte, demoliendo parte de las caballerizas para su construcción.5
- Torre de los Hidalgos, ubicada a los pies de la torre de la Vela, tiene carácter defensivo.
Oeste
- Torre de la Vela, (1238-1273) constituía la torre de defensa más grande del conjunto militar, por su altura domina toda la vega granadina. Su nombre procede de la campana que los cristianos colocaron en la torre tras la conquista de la ciudad. Sonaba al alba para avisar a los agricultures del riego de las huertas en la Vega de Granada, por tanto, los mantenía en vela, y de ahí su nombre.
- Bastión de artillería, revellín, construido en el periodo cristiano.
Sur
- Torre de la pólvora.
- Jardín de los Adarves, fue creado en el siglo XVII, cuando la fortaleza perdió su carácter defensivo. Existen buenas panorámicas desde este jardín.
Este, es el lado más amplio del trapezoide que forma la alcazaba, con unos 75 metros. Al otro lado de esta muralla se encuentra la gran explanada de la plaza de los Aljibes.
- Torre del Homenaje, es la mayor de las torres de este frente, tiene entre 22 y 26 metros de alto y se levanta en la parte más elevada de la fortaleza. En el siglo XIV, constituía junto con la Torre de la Vela, los principales bastiones defensivos de la Alhambra, ofreciendo protección al recinto. En su interior se distinguen seis pisos. Se cree que fue en esta torre donde instaló su residencia Al-Ahmar, el fundador de la Alhambra, cuando decidió construir su palacio. Se encuentra verticalmente, dividida en dos zonas bien diferenciadas. Una zona inferior que comprende los dos primeros niveles, en los que su acceso se hace bajo la muralla norte. La zona superior que comprende el resto de niveles tiene accesos desde la muralla norte y el adarve del muro este. El nivel más alto pudo servir a los alcaides del recinto de centro de operaciones de defensa, y el más bajo, una mazmorra, para almacenar grano, sal y especias.5
- Torre Quebrada.
- Torre Adarguero.
En el centro de la alcazaba se encuentra el barrio castrense, donde se hayan los restos de los muros de las casas que ocupaban este lugar.

Vista en primer plano de la barbacana y muralla de la Alcazaba, por detrás la torre de armas y al fondo torre de la Vela.
Palacios nazaríes

Plano de los Palacios nazaries y de las Habitaciones del Emperador.
Mexuar -amarillo-
Palacio de Comares -rojo-
Palacio de los leones -verde-
Habitaciones del Emperador -azul-
Los palacios nazaríes son el conjunto formado por el Palacio de Comares, construido en primer lugar, y el Palacio de los Leones. Cronológicamente fueron levantados después de la alcazaba, el generalife y el Partal, siendo su construcción del primer tercio del siglo XIV. Constituía la sede de las funciones administrativas, de la corte, protocolo y retiro y disfrute privado. Al bajar las escaleras de acceso, se van encontrando las siguientes dependencias:
Mexuar. Su nombre proviene del término árabe Maswar, lugar donde se reunía la Sura (Consejo de Ministros). La estancia ha sufrido numerosas transformaciones. Debió pertenecer a una estructura anterior al Palacio de Comares y al de Los Leones, y probablemente al construido por Isma’il I (1314-1325).6

Paño de azulejos del Mexuar, en el que se combina la técnica y estilo nazarí con la simbología cristiana, que representa el águila bicéfala de la monarquía castellana.
Es la sala más antigua. En época árabe servía de sala de audiencia y justicia para casos importantes. Tenía una cámara elevada cerrada por celosías donde se sentaba el sultán a escuchar sin ser visto. No existían las ventanas laterales. Tenía el techo abierto en su parte central. Al fondo se encuentra una pequeña habitación, que servía de oratorio, desde donde se divisa el Albaicín, se encuentra orientado de forma diferente a la muralla, para cumplir su función religiosa. En tiempos cristianos se utilizó como capilla.

Detalle de la escritura de la pared de la sala del Mexuar: «Sólo Dios es vencedor».

Interior del Mexuar.
La decoración es el resultado de multitud de intervenciones entre el siglo XVI y el siglo XX, en la que destacan las columnas y capiteles característicos de la arquitectura nazarí. En los paños de azulejos que decoran sus paredes se combinan piezas de origen nazarí con intervenciones y piezas cristianas. A continuación del Mexuar se accede a un patio con fuente en el centro y una cámara a la izquierda, denominado patio del Mexuar.

Detalle de la fachada del cuarto dorado.
Patio del Mexuar y Cuarto Dorado. No se conoce con certeza el destino dado a esta zona en época árabe. Si se conoce que se adaptó como habitación para Isabel de Portugal, para su estancia en la Alhambra, aunque nunca llegó a ocuparla. En la fachada del cuarto destacan los capiteles de su arco de entrada. Dentro del cuarto sobresale la techumbre, en madera de cedro, y decoración de piñas y conchas, con armadura de cuatro faldones. Bajo él, ventanas cerradas con celosías. Dos portadas rectangulares bordeadas de cenefa de cerámica. La estancia está decorada con pinturas góticas y escudos y emblemas de los Reyes Católicos. Al cruzar el patio del Cuarto Dorado se accede a la fachada del palacio de Comares.

Fachada del palacio de Comares.
Palacio de Comares. La fachada del palacio fue erigida por mandato del Mohamed V, siendo inaugurada en 1370, es una fachada interior que anticipa la majestuosidad del interior del palacio.
Patio de los Arrayanes
El Patio de los Arrayanes es el gran espacio perteneciente a la Alhambra, situado al este del patio del Cuarto Dorado y al oeste de la sala de Baños y patio de los Leones. A su alrededor se articulan una serie de estancias siendo las más importantes las destinadas a cuarto de trabajo del sultán (diwan) o sala del trono y de audiencias (situadas al norte del patio). Son los aposentos conocidos como Palacio de Comares. El patio es rectangular de dimensiones bastante considerables y con un estanque o alberca en el centro rodeado de plantaciones de arrayanes (o mirtos). Se le conoce también con los nombres de patio de los Mirtos, patio de la Alberca y patio de Comares.

Patio de los Arrayanes con la alberca rodeada de mirtos.
El nombre de comares ha dado lugar a investigaciones etimológicas muy variadas. He aquí una pequeña muestra:
Según indica en su diccionario de palabras árabes Diego de Guadix, la voz comares puede derivar de cun, con el significado de levántate más ari con el significado de mira. Así, cunari significaría “levántate y mira”. La palabra, corrompida después, dio comares, que haciendo una traducción libre, vendría a significar: «Abrid los ojos y ved».
En opinión del historiador granadino del siglo XVI Luis del Mármol, el nombre de comares se debe a una labor de artesanía artística muy apreciada entre sirios y persas llamada comaraxía, una técnica de fabricación de vidrios para el exterior y los techos.
Otra teoría es que el nombre de comares procede de la palabra árabe qumariyya o qamariyya, que son los vidrios de colores que pueden observarse aun en el balcón del salón de Embajadores.
Qumarish es el nombre de un lugar al norte de África de donde procedía gran parte de los artesanos que trabajaron en la Alhambra.
La construcción de este complejo del patio de los Arrayanes fue iniciada por el rey nazarí Ismail I de Granada que reinó desde 1314 a 1325. Continuó la obra Yusuf I de Granada (1333-1354) que murió asesinado antes de verla concluida. Finalmente Muhammad V pudo terminarla en 1370.
En su origen se accedía al patio y demás dependencias a través de otro gran patio que ya no existe más que en un pequeño recuerdo que es el patio de Machuca, mucho más reducido que lo fue aquel.

Estanque del patio de los Arrayanes; en primer término una de las fuentes que lo abastecen de agua.
El patio. En el centro se encuentra el estanque que mide 34 metros por 7,10 metros; se abastece de agua por medio de dos pilas de mármol situadas en cada extremo. Está enmarcado por unos pasillos pavimentados en mármol blanco, delimitados a su vez por la plantación de los mirtos o arrayanes bien recortados que forman como un seto, de un verde brillante que contrasta con el mármol y con el agua. Alrededor del estanque y los mirtos y por sus cuatro costados, hay un gran espacio que constituye el patio propiamente dicho, cuyo suelo es también de mármol blanco. En su origen estaba adornado también por naranjos silvestresnota de fruto amargo, según la descripción hecha por el embajador veneciano Andrea Navagiero que hizo una visita a la Alhambra en el siglo XVI.
El patio fue restaurado en el siglo XIX como tantos otros sitios de la Alhambra. El restaurador principal fue el académico arquitecto Rafael Contreras Muñoz (1826-1890). Uno de los cambios más espectaculares consistió en levantar el pavimento que estaba enlosado con lápidas procedentes de cementerios musulmanes, sustituyéndolas por un enlosado de mármol.

Primera galería abierta en el muro norte.
Distribución de los aposentos. Al muro norte se abre primero una galería o pórtico abierto en cuyo centro hay una pequeña cúpula. En los extremos hay unas alcobas que se supone fueran de tertulia mientras esperaban la audiencia del sultán. En las paredes y por encima del zócalo de azulejos se escribieron poesías de Ibn Zamrak, ministro de Muhammad V, en alabanza de este sultán. Hay también dos nichos o tacas, esculpidos en mármol y adornados con azulejos, donde se colocaban jarrones con flores o lámparas de aceite. A lo largo de la galería hay un zócalo de azulejos realizados por Antonio Tenorio y el morisco Gaspar Hernández entre 1587 y 1599.

Arabescos donde puede verse el escudo nazarí y la leyenda «Sólo Dios es vencedor»
Desde esta galería se pasa a la siguiente estancia llamada Sala de la Barca, que es la antecámara del Salón de Embajadores. Se accede por un arco apuntado, decorado con mocárabes que todavía conservan parte de su policromía original en oro y azul. El nombre dado de Barca se suele explicar por su parecido físico con una barca puesta del revés, pero otros historiados dan explicaciones más eruditas. Los hermanos Oliver y Hurtado que escribieron en 1875 sobre Granada y sus monumentos árabes, explican su teoría sobre el nombre de esta sala, según la cual la palabra barca es una corrupción de baraka, que significa bendición, palabra escrita repetidamente en el friso inferior. En el mismo pórtico de la sala hay una inscripción que dice:
Bendito quien te dio mando en sus siervos y en ti gracia y favor al Islam hizo.
Los muros están trabajados con finas yeserías que incluyen el escudo nazarí dentro del cual se ve la palabra baraka (bendición) y el lema de la dinastía, «Sólo Dios es vencedor». La cubierta de madera, de rico trabajo de marquetería es una reproducción que se terminó en 1964. El original se destruyó en un incendio en 1890.8 Desde la Sala de la Barca se accede al espacio más importante: Salón de Embajadores.

Salón de Embajadores. Pueden a preciarse dos alcobas (descritas en el texto).
El salón de Embajadores es la estancia cuadrada que está bajo la torre de Comares. Los muros están estucados (un trabajo primoroso procedente de Persia y de Irak) y en ellos se repite en planchas la leyenda «solo Alá es vencedor». En tres de ellos (el cuarto corresponde a la pared de entrada) se abren tres espacios estrechos y alargados (de unos dos metros y medio de profundidad) que son alcobas, con sus correspondientes ventanas (llamadas ajimez que al principio tenían su celosía de madera o su vidriera) que dejan pasar la luz exterior. La alcoba que está justo frente a la puerta de entrada al salón estaba destinada al trono; allí se sentaba el sultán dando la espalda a la luz exterior, luz que por otra parte recibía de frente el embajador visitante, estando así en inferioridad de condiciones. En este hueco se pueden leer unas inscripciones en verso que narran la utilidad del espacio:
Aunque mis compañeras [las otras alcobas] sean constelaciones de estrellas, a mí sólo, y no a ellas, pertenece la gloria de alojar al Sol. Me vistió con traje de esplendor y excelencia mi amo el sultán Yusuf.
El suelo era de cerámica vidriada con los colores blanco y azul, donde se podía ver como ornamento el escudo de armas de los sultanes de Granada sustituido después en la restauración de 1815 por losas de barro y azulejos del siglo XVI en su centro.9 Estaría algo más elevado pues era costumbre sentarse en el suelo sobre cojines y mirar por la ventana desde esa posición. Todo el perímetro está recorrido por un zócalo de azulejos. El techo es una obra maestra de la carpintería granadina. Es una bóveda que se eleva a 18 metros de altura y que representa el firmamento. Está construida con madera de cedro e incrustaciones de otras maderas de diferentes colores, en total 8 017 piezas. La parte central representa el Séptimo Cielo o Paraíso islámico donde se aloja Alá. A este centro se puede llegar tras la ascensión de los otros seis círculos que lo rodean. Las cuatro diagonales simbolizan los cuatro ríos del Paraíso.

Galería del muro sur.
La galería del muro sur está compuesta por tres arcos iguales y uno central más elevado. La recorre un zócalo de azulejos. Esta galería también recibe a sus visitantes con una leyenda:
La ayuda y la protección de Dios y una victoria espléndida para nuestro Señor Abu Abd' Allah, emir de los musulmanes
No se tiene mucha noticia sobre las dependencias que había en este lado. Fueron destruidas parcialmente para la construcción del palacio de Carlos V en el siglo XVI. Por encima de esta galería hay un corredor y sobre éste otra galería de seis arcos iguales y otro con dintel y zapatas de madera en el centro. Las celosías son del siglo XIX.
En el lado este del patio se abren distintas puertas que conducen a estancias privadas del sultán y su corte.

Placa conmemorativa de la estancia del escritor en el palacio de la Alhambra.
La visita de Washington Irving. Cuando Washington Irving entró por primera vez en este patio se quedó impresionado por su belleza; lo describió como un inmenso espacio de unos 150 pies de longitud y más de 80 pies de anchura. Describió las galerías que se mostraban a ambos lados. Vio escudos en las cornisas y en otros lugares y escrituras árabes en relieves. En el centro se encontraba el inmenso estanque —según sus propias palabras— de 124 pies de longitud, 27 de anchura y 5 de profundidad, con agua que manaba de dos vasos de mármol. Vio en sus aguas una buena población de pececillos dorados. Lo bautizó con el nombre de Patio de la Alberca. El estanque en aquel momento estaba rodeado de rosales.
Sala de la Barca. Desde la galería norte del Patio de los Arrayanes y a través de un arco apuntado de mocárabes, accedemos a la sala de la Barca, llamada así ya que presenta ricas yeserías con el escudo nazarí y dentro de él, la palabra «Bendición», que en árabe se dice "Baraca", y que los castellanos escucharon como "Barca"; otra explicación podría ser que el nombre proviene por tener un artesonado magníficamente ensamblado en forma de casco de barco invertido. Esta sala, de forma rectangular de 24 metros por 4,35, parece ser que era más pequeña en un principio, y su ampliación fue realizada por Mohamed V. En esta sala existió una bóveda semicilíndrica que fue destruida por el fuego del incendio de 1890, sustituida por una reproducción de aquella que fue totalmente terminada en 1964. Los muros presentan las yeserías con el escudo nazarí y la palabra «Bendición» y el lema de la dinastía « no hay vencedor mas que dios».
La sala se encuentra rodeada por un zócalo en cuyos extremos encontramos alcobas con zócalos de azulejos, que revisten las columnas que sujetan arcos peraltados y festoneados de mocárabes y pechinas. Desde aquí se accede al Torreón de Comares, presidido por el Salón de los Embajadores.

La Torre de Comares al anochecer vista desde el paseo del Padre Manjón
Torre de Comares, Salón de Comares o Salón de los Embajadores
Desde el patio de los Arrayanes destaca en uno de sus extremos, el imponente torreón de Comares, se accede a él por la sala de la barca. El salón de Comares es la estancia más amplia y elevada de todo el palacio, ocupa el interior de la Torre de Comares, dominando con su vista el valle del Darro. Su construcción data del segundo tercio del siglo XIV, siendo sultán nazarí de Granada, Yusuf I, aunque probablemente no viera terminada la obra que ordeno construir y adornar ricamente, ya que diversas inscripciones atribuyen su autoría a su hijo Mohamed V, su función principal era celebrar las audiencias privadas del sultán.
Presenta planta cuadrada de 11 metros de lado y 18 de altura, originalmente el suelo era de mármol y en la actualidad de barro. En el centro de la sala se puede observar un cuadrado con el nombre de Alá escrito sobre azulejos.
Es un lugar con un contenido poético muy rico, podemos encontrar distintas composiciones, alabanzas a Dios y al emir y también algunos fragmentos del Corán. Cada centímetro de la pared está cubierto por algún elemento decorativo.

Vista del salón de Comares o de Embajadores, en el que se observan los vanos o alcobas abiertos en cada uno de los lados del salón.
En los laterales del salón hay 9 alcobas, tres por cada uno de los lados del salón, correspondiendo la alcoba central del lado norte al sultán, también se abren una serie de ventanas cerradas antiguamente por celosías de madera y vidrieras de colores llamadas cumarias, (de ahí el nombre de comares). Todas las paredes están cubiertas de yeserías con motivos de conchas, flores, estrellas, escrituras. Sala policromada: oro en el relieve, colores claros en lo profundo. Zócalo decorado con azulejos. El suelo original era de cerámica vidriada en blanco y azul con escudos de armas como motivos ornamentales.
Las paredes están, además, decoradas con versículos coránicos y poemas realizados en yesería, lo que le debían conceder a esta sala en sus orígenes, con la decoración que no nos ha llegado, con sus juegos de luz y su ambiente cortesano, una de las salas palaciegas más impresionantes del mundo islámico. La calefacción era de braseros y la iluminación con lámparas de aceite.
Uno de los aspectos más atrayentes del Salón de los Embajadores es su techo, de forma cúbica. En él se representan los siete cielos de la cultura musulmana, situados uno encima de otro. El Corán dice que sobre ellos está el trono de Dios; todo el techo está lleno de estrellas, en total son ciento cinco.

Patio de los Arrayanes. Alhambra de Granada.
Palacio de los leones. En un extremo del lado izquierdo del patio de los arrayanes, un pequeño arco sirve de ingreso a un pasadizo por el que se llega a la zona privada del monarca, el Harén (Haram significa lugar privado), el denominado palacio de los Leones.
El palacio de los Leones fue mandado construir por Muhammad V como residencia del sultán, supone un ejemplo de integración de arquitectura y agua, en la que esta se reparte desde la fuente de los leones situado en el patio hacia todo el palacio. El palacio se estructura a partir del patio, alrededor del cual se distribuyen las distintas estancias. Alrededor, las alcobas, salas privadas del sultán y esposas con piso alto abierto, sin ventanas que miren al exterior, pero con jardín interior como corresponde a la idea musulmana del paraíso. De cada una de las cuatro salas fluye un arroyo que va al centro: Los cuatro ríos del Paraíso descritos en el Corán.
Sala de los mocárabes. Se llama así por la bóveda de mocárabes que la cubría. La de hoy es del siglo XVII. Muros con labor de yesería, inscripciones religiosas y escudo de la dinastía Nazarí.
Patio de los Leones

El Patio de los Leones se comenzó su construcción en 1377,7 por deseo de Mohamed V, hijo de Yusuf I, siendo su alarife mayor Abén Cecid, concluyéndose trece años después. Los árabes de Granada, antes de llamar al Patio de los Leones Sahan al-Osud, lo hicieron con la denominación de Al-Haram. De planta ligeramente trapezoidal, el lado oriental es mayor que el de poniente (el de la sala de Mocárabes), el largo del conjunto 219 pies, incluyendo las salas de Mocárabes y Reyes es igual al triple del ancho del Patio en su lado menor o de poniente (73 pies).8

El patio se encuentra rodeado por una esbelta galería con 124 columnas de mármol blanco de Macael (Almería), que se presentan aisladas y agrupadas en conjunto de dos, tres, y hasta cuatro en las esquinas, sustentando, o bien sólo apuntalando, las arcadas de filigrana, siendo simétricos los lados mayores y asimétricos los menores, de los que avanzan sendo pabellones hacia el patio, en cuya intersección de ejes transversales y longitudinal se ubica la fuente con los doce leones que le da nombre.

Las columnas se unen con paños calados que dejan pasar la luz. Fustes cilíndricos muy delgados, anillos en la parte superior, capiteles cúbicos sobre los que corren inscripciones. Las planchas grises de plomo convierten los empujes horizontales en verticales. Los dos templetes que avanzan a los dos lados opuestos del patio son como un recuerdo de la tienda de campaña de los beduinos. Son de planta cuadrada, decorados con cúpulas de madera que se apoyan en pechinas de mocárabes. El alero es obra del siglo XIX. Toda la galería está techada con artesonado de lacería.

Arcos en patio de los leones, la Alhambra de Granada.

Fuente de los Leones. Los últimos datos conseguidos gracias a la restauración de los leones y la taza de la fuente han podido indicar que, tanto los leones como la taza, datan del siglo XIV y de la misma procedencia y material (mármol de Macael, Almería) siendo fabricada la fuente en su conjunto, tanto leones como taza, al mismo tiempo. Este descubrimiento viene a rectificar las informaciones que indicaban la procedencia de los leones de un palacio, anterior a la Alhambra, perteneciente al primer visir de la dinastía zirí Samuel Ibn Nagrella. A su vez, se ha podido descubrir tres tipologías de leones sobre la base de sus elementos formales diferenciadores. Cada una la conforma un grupo de cuatro leones con similitud dos a dos en sus rasgos: nariz, pelaje de la melena, fauces y posición y relieve de la cola.
(...)A tan diáfano tazón,
tallada perla,
por orlas el aljófar remansado,
y va entre margaritas el argento,
fluido y también hecho blanco y puro.
Tan afín es lo duro y lo fluyente
que es difícil saber cuál de ellos fluye(...)

La fuente de los leones tiene diversas significaciones o simbologías, ninguna de ellas corroboradas. Por una parte los doce leones tienen una simbolización astrológica, cada león alude a un signo zodiacal. Por otra, tiene una significación política o mayestática que está relacionada con el templo del rey Salomón (puesto que hay una inscripción en la fuente referida a este) y el mar de bronce del mismo templo. Por última y la más importante, alude a un símbolo paradisíaco refiriéndose así a la fuente, originaria de la vida y los 4 ríos del Paraíso coránico. Pero lo que sí se puede decir, es que la fuente como tal es una alegoría del poder que reside en el sultán.

Techo de la sala de los Abencerrajes de la Alhambra.
Sala de los Abencerrajes. Esta sala fue alcoba del sultán. Al ser cuarto privado no hay ventanas al exterior. Los muros están ricamente decorados. El estuco y los colores son originales. El zócalo de azulejos es del siglo XVI, de la fábrica de azulejos sevillana. La cúpula está decorada con mocárabes; en el suelo, en el centro, una fuentecilla servía para reflejar la cúpula de mocárabes, que al estar ricamente decorada, conseguía una luz encantadora y mágica, pues al entrar la luz por la parte superior iba cambiando según las distintas horas del día.

Bóveda de mocábares en la Sala de los Reyes.
Sala de los Reyes. Ocupa todo el lado oriental del patio. Llamado así por la pintura que ocupa la bóveda del cuarto central. Es la sala más larga del Harén, dividida en 3 cuartos iguales y dos pequeños que pudieran ser armarios, por su emplazamiento y falta de iluminación. Probablemente destinada a fiestas familiares. En la bóveda del centro, las pinturas representan a los 10 primeros reyes de Granada desde la fundación del reino, uno de ellos con barba roja que puede ser Mohamed ben Nazar llamado Al-Hamar el Rojo, fundador de la dinastía Nazarí. En las bóvedas laterales hay pinturas que representan caballeros y damas, realizadas a fines del siglo XIV. Hubo un intercambio artístico en tiempos de Pedro I de Castilla quien solicitó ayuda al rey de Granada para restaurar los Reales Alcázares de Sevilla. Las pinturas llevan una técnica muy laboriosa:
- Planchas de madera de peralejo bien cepillada y formando una elipse.
- Sobre la superficie cóncava se extiende el cuero mojado, pegándolo con un baño de cola y claveteado con pequeños clavos de cabeza cuadrada cubiertos de estaño para evitar la oxidación.
- Sobre el cuero, una capa de yeso, caña y cola de 2 cm de espesor ya tostada y pintada en rojo. Sobre esta capa y con un punzón se dibujan los temas.
La división interna de la sala está realizada mediante arcos de atajo, cortando la estancia de forma perpendicular. Estos arcos muestran su intradós repletos de mocárabes y sus paramentos están cubiertos por yeserías, en los que aparecen símbolos nazaríes y también cristianos. La apariencia conjunta de la sala con sus arcos decorados puede recordar algún modelo de mezquita almohade.

Bóveda de mocárabes de la Sala de las dos Hermanas.
Sala de las Dos Hermanas. Se sale del Patio de los Leones por el lado opuesto a la Sala de los Abencerrajes. Se pasa una puerta original de taracea, una de las más bellas del palacio, actualmente conservadas en el Museo de la Alhambra. El nombre de Dos Hermanas procede de las dos losas de mármol blanco que hay en el suelo a ambos lados de la fuente central, exactamente iguales en tamaño, color y peso. Tiene un mirador sobre la ciudad y comunicación directa con los baños.
Esta sala, al igual que toda la Alhambra, tiene poemas escritos en las paredes. En esta sala se puede leer uno que dice:
Sin par,
radiante cúpula hay en ella
con encantos patentes y escondidos
(...) Nunca vimos jardín tan verdeante,
de más dulce cosecha y más aroma.
En cada cuarto del harén hay dos puertecillas: una da al harén alto, otra es una letrina. No hay cocinas. Empleaban el anafe o cocinaban fuera.

Mirador de Lin-dar-Aixa
Sala de los ajimeces y mirador de Daraxa o Lindaraja. Al fondo de la sala anterior está el Balcón de Lin-dar-Aixa. Daba al valle del río Darro y se veía a lo lejos la ciudad. La construcción del Pabellón de Carlos V interrumpe ahora la vista, por eso se construyó el Jardín de Lindaraja, italiano, con fuente renacentista y taza de mármol árabe. En el mirador de Lindaraja, se puede leer el siguiente poema: "Yo soy de este jardín el ojo fresco" (...) "En mi, a Granada ve, desde su trono"
Habitaciones del Emperador. Con el nombre de habitaciones del Emperador, se conocen los seis aposentos, que fueron construidos durante el reinado de Carlos I, entre 1528 y 1537 y que configuran el patio de Lindaraja, hacia un lado y el Patio de la Reja, hacia el otro.
Cuarto del emperador. Construido para que el rey Carlos habitase aquí mientras estaba en Granada, en su viaje de bodas. En el cuarto siguiente a éste hay una placa de mármol en memoria del escritor Washington Irving que residió en esta parte del recinto, mientras escribía sus Cuentos de la Alhambra, en 1829.
El peinador de la reina. Torre árabe llamada de Abul-Hachach, usada por el sultán para recreo y meditación. Tras la conquista cristiana fue reformado. La planta superior pudo servir como tocador real y podría haber sido utilizado por la reina Isabel de Farnesio. Su estructura tiene influencias romanas por la presencia del mirador con la galería porticada y su decoración pictórica.
Patio de la reja o de los cipreses. Se accede a este patio desde la última de la habitaciones de Carlos V, su construcción data de tiempos de Carlos V, al construirse las habitaciones del emperador.

El Partal. Debe su nombre a la voz árabe que significa pórtico, y se refiere a los restos de la residencia del Sultán Yusuf III, el más septentrional de los Palacios Nazaríes.
Corresponde a la zona de las viviendas de los criados de Palacio.
- Pórtico del Palacio
- Jardines y paseos
- Rauda
- Palacio de Yusuf III
- Paseo de las Torres
- de los Picos
- de las Infantas: Construida en 1395. Es la mejor conservada. Buen ejemplo de lo que era una vivienda andalusí con todas sus comodidades. Es un palacete con bancos a la entrada para los eunucos, patio interior con alcobas, entrada en recodo, fuente en el centro, ventanas a los huertos de flor (en este caso, el Generalife), piso superior para las damas. Arriba, terraza. El techo era de mocárabes y desapareció en un terremoto. Curiosa bóveda de entrada. Residencia de las hermanas Zaida, Zoraida y Zorahaida, cuya historia narra Washington Irving en Cuentos de la Alhambra.
- de la Cautiva: Suntuosa construcción de Yusuf I. Debe su nombre a Isabel de Solís, que como dice el nombre de dicha torre estaba allí cautiva. Entre sus poemas se puede leer:
En sus zócalos, de obra de azulejos,
y en su suelo, hay prodigios cual tejidos.

Detalle de El Partal. Alhambra de Granada.

Baños árabes. Alhambra de Granada.
Baños. La joya de la casa árabe. El baño para el musulmán es una obligación religiosa. La construcción es copia de las termas romanas. Tienen tres salas:
1. Cambio de ropa y descanso. Sala de las camas y reposo. Aquí se desnudaban, pasaban luego al baño y volvían a descansar. A veces les traían aquí la comida. En la galería alta había músicos y cantores.
2. Masaje. Sala de refresco o masaje. Son dos galerías con arcos.
3. Vapor. Sala de vapor. Más pequeña. Las bóvedas están abiertas con tragaluces en forma de estrella que en su día estaban cubiertos con cristales de colores, pero no herméticos, de manera que pudiese salir el vapor y entrar el aire fresco.

Convento de San Francisco. Es el actual Parador de Turismo. Fue casa noble andalusí. Después de la conquista se donó a los franciscanos siendo así el primer convento de Granada. Patio andalusí bien conservado, con mocárabes, balcón cerrado con celosías y aljibe.
Secano o Alhambra alta. Se está estudiando actualmente con excavaciones. Barrio del pueblo andalusí y de nobles. Ruinas del Palacio de los Abencerrajes. Torre del Agua, por donde entra en el recinto la Acequia Real.

Torre de los Siete Suelos. Sólo se han encontrado cuatro, (bajo sus pies). Famosa por aparecer en algunas de las aventuras de los Cuentos de la Alhambra, de Washington Irving, ambientadas en ella. La leyenda dice que Boabdil abandonó el palacio desde este local.

Vista panorámica de La Alhambra al atardecer, en la que se distingue de derecha a izquierda, la torre de la Vela, la torre de las Armas, la torre del Homenaje, la torre del Cubo, el palacio de Carlos V, la torre de Comares y el peinador de la Reina.
Generalife

Vista del Generalife desde la Alhambra.
El Generalife (en árabe: جَنَّة الْعَرِيف) es la villa con jardines habitada por los reyes musulmanes de Granada como lugar de descanso, situado en la ciudad de Granada, España. Fue concebida como villa rural, donde jardines ornamentales, huertos y arquitectura se integraban, en las cercanías de la Alhambra. El origen del nombre está discutido. Algunos abogan por Yannat al-Arif como Huerta del Arquitecto, o "Jardín del arquitecto" aunque pudo significar El más excelso jardín. Ese huerto real era común en las cortes hispano-árabes y es fruto de las reformas y añadidos que le aportaron los diferentes sultanes. Por sus elementos decorativos más antiguos, el palacio debió de construirse a finales del siglo XIII por el segundo sultán de la dinastía nazarí, Muhammad II (1273-1302). Fue declarado, junto con la Alhambra, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1984.
El Generalife está situado fuera de las murallas de la Alhambra, al este, en la ladera del Cerro del Sol. Fue finca de recreo de los sultanes nazaríes pero también utilizada para su explotación agrícola. En el período medieval tenía al menos cuatro huertas y la residencia es un palacio al que el visir Ibn al-Yayyab llamó la Casa Real de la Felicidad.
Es de estilo árabe nazarí y está situado en el lado septentrional de la Alhambra. En la época de su construcción, estaba situado fuera del perímetro de la Granada musulmana, y carecía de comunicación directa con la Alhambra, siendo su acceso principal el camino del Barranco Aikabia, la actual Cuesta de los Chinos, que ascendía desde el río Darro.
Está formado por un conjunto de edificaciones, patios y jardines, que lo convierten en uno de los mayores atractivos de la ciudad de Granada, y, junto con la Alhambra, en uno de los conjuntos arquitectónicos más destacables de la arquitectura civil musulmana. Desde el exterior se contemplan dos pabellones situados a norte y sur, y comunicados por un patio recorrido por el curso del agua, los dos pabellones se encuentran muy reformados.

Fuentes del Patio de la Acequia.
Acceso. El Generalife tuvo en su momento tres vías de acceso, una proveniente de la Alhambra, destinada al sultán y su séquito, otra se situaba hacia el extremo sureste, próxima al pabellón de entrada, y una tercera en el norte, por el llamado Postigo de los carneros.
El acceso se efectúa hoy día por los denominados Jardines Nuevos y el Paseo de los Cipreses, fruto del saber hacer de Francisco Prieto Moreno, que fueron iniciados en 1931, y en los que creó una concatenación de espacios abiertos formados por cipreses que, por medio del arte topiario, figuran arquitecturas. Los espacios confinados reproducen modelos de patios de la Granada nazarí. La sabia combinación de los referentes históricos y la tradición granadina (suelos empedrados, el uso del agua, los exuberantes macizos florales...) hace de los Jardines Nuevos un lugar destacado, que muchos consideran ya inseparable de los palacios a los que anteceden. En 1954 se inauguró un auditorio al aire libre, fundamentalmente utilizado para las funciones de danza de los Festivales de música y danza de Granada.
A continuación de los jardines mencionados, se accede al Generalife a través de dos patios de entrada al conjunto arquitectónico nazarí, que, al estar edificado en una ladera, y siguiendo una composición (paratas) que será la base de muchos cármenes granadinos, se escalona en estrechas franjas separadas por muros de contención. Así, los alarifes crearon una serie de espacios recoletos e íntimos, características comunes en la arquitectura musulmana, pero también volcados a las excepcionales vistas de la ciudad y la Alhambra.
El primer patio al que se accede es el llamado del Apeadero, por tener un banco junto al muro del fondo preparado para la descabalgadura. El segundo, situado más alto sirve de comunicación por una empinada escalera al Patio de la Acequia.

El patio de la Acequia visto desde la sala Regia.
Patio de la Acequia. El primero –y más emblemático– de los patios es el llamado de la Acequia. Responde al esquema árabe de patio cuatripartito (Char-Bagh) de origen persa y de gran tradición en Andalucía, pero condicionado por la disposición eminentemente longitudinal obligada por el terreno y potenciada por la presencia de la Acequia Real, que llevaba el agua al resto de los huertos y posteriormente a la Alhambra. De esta manera, el otro brazo de la cruz queda tan sólo insinuado por una interrupción en la vegetación, y una fuente baja en el cruce de ambos. La acequia está cuajada con dos filas de surtidores que cruzan sus chorros de agua de forma espectacular, que fueron añadidos en el siglo XIX. No hay que olvidar, que aunque el Generalife es, al igual que la Alhambra, una construcción eminentemente musulmana, la influencia cultural cristiana de sus concepciones arquitectónicas siempre fue de gran importancia: con anterioridad a 1492, por el constante trato con los reinos vecinos y el aislamiento respecto al resto del islam, y posteriormente, por el uso y adaptación de los espacios a las concepciones occidentales llevados a cabo por sus distintos dueños y habitantes. Otro ejemplo de lo anteriormente dicho es la apertura a lo largo del patio de un amplio mirador ya en época cristiana.

Sala Regia. Al fondo del patio de la Acequia, y tras un pórtico de cinco arcos, se accede a la Sala Regia, decorada con yeserías, y que conduce a una mirador del siglo XIV. La decoración tanto de esta sala como del resto del conjunto es comparativamente más sobria que la de las salas de la Alhambra. Como villa rural de descanso, la ausencia de fasto debía de ser preponderante. En palabras de Leopoldo Torres Balbás:
En el Generalife todo es sencillo e íntimo. No hay nada –arquitectura o naturaleza condicionada por la mano del hombre– que trate de asombrarnos con pretensiones de magnificencia o de monumentalidad.

Patio del Ciprés de la Sultana. De la Sala Regia se accede, a través de unas escaleras, a un cuerpo con doble galerías renacentistas, al que se abre el Patio del Ciprés de la Sultana, protagonista de misterios en la tradición granadina, y en el que la leyenda narrada por Ginés Pérez de Hita, sitúa los encuentros de la esposa de Boabdil con un caballero, miembro del clan de los Abencerrajes, pariente del sultán. El patio, muy modificado en época cristiana, conserva, sin embargo la influencia de sus antiguos habitantes, en lo que Chueca Goitia dio en llamar invariantes castizos, y el encanto romántico de sus surtidores y su frondosa vegetación. La construcción del patio se remonta a la época comprendida entre finales del siglo XIII y el primer cuarto del siglo XIV.

La Escalera del Agua, vista desde arriba.
Jardines Altos y la Escalera del Agua. A continuación, y prosiguiendo el ascenso, a través de la escalera de los leones, se llega a los denominados Jardines Altos del Palacio. Para ello pasaremos por la Escalera del Agua, ingenioso artificio al servicio del disfrute de los sentidos. El objetivo principal de dicha escalera era comunicar el palacio del Generalife con una pequeña capilla situada en lo alto de la colina. El acceso, en pendiente, representaba un problema que el alarife nazarí supo salvar con singular maestría: la escalera, interrumpida por varios descansillos de planta circular presididos por fuentes bajas, tiene como pasamanos dos canales hechos con humildes tejas y ladrillos y encalados. Por ellos discurre el agua de la Acequia Real, abrupta e irregularmente produciendo una sinfonía de tranquilidad y reposo, y humedeciendo el ambiente, todo bajo una cerrada bóveda de laureles. El espacio resultante, umbrío y fresco, servía a la vez para efectuar las abluciones previas a la oración, y de esa manera, se convertía en el sahn que toda mezquita requiere. La escalera es toda una lección arquitectónica de respuesta a un condicionante sabiendo hacer de necesidad virtud y con los materiales más pobres.

Entorno. El Generalife está situado en una de las laderas del llamado Cerro del Sol, separado de la Alhambra por el barranco de la cuesta de los Chinos, acceso de origen medieval a ambos recintos, desde la ciudad musulmana. Cerca del Generalife, y relacionadas con él, se encuentran diversas construcciones de época nazarí, como Los Albercones, los restos del palacio de Dar al-Arusa y la Silla del Moro. Un poco más alejados, pero formando parte del mismo sistema hidráulico de la Acequia Real-Dehesa del Generalife, existen restos de la llamada Alberca Rota, del Albercón del Negro y otras construcciones, como el Aljibe de la Lluvia.
Miscelánea
- El primer movimiento de la obra impresionista Noches en los jardines de España (1909-1915) de Manuel de Falla está ambientado en el Generalife.
- Paco de Lucía tiene una obra inspirada en el Generalife llamada "Generalife bajo la luna".
- Joaquín Rodrigo escribió la obra "Junto al Generalife" para guitarra sola.
- En Granada hay un instituto de Educación Secundaria y Bachillerato llamado Generalife.
- El primer alcaide del Generalife fue Gil Vázquez Rengifo.

Paisaje del palacio que se encuentra en el Generalife de Granada.

El árbol de la vida.
Inscripciones. Existen unas 10 000 inscripciones en la Alhambra, la mayoría de ellas poemas, sentencias, textos del Corán y jaculatorias. Todas son en árabe clásico y muchas corresponden a los poetas de la Corte de Yusuf I en el siglo XIV. Los aposentos del rey nazarí en el palacio de Comares son los que poseen un número mayor de textos, 3116, el 35 % del total, recogido en el Corpus Epigráfico de la Alhambra, impreso por el CSIC; estos podían ser originalmente compuestos para la ocasión o escritos con anterioridad. Ibn al-Zayab, Ibn al-Jatib e Ibn Zamrak son los autores de la mayor parte de ellos. Los tres escritores formaban el grueso de los poetas de la corte de Yusuf I.
La Alhambra y la cultura popular

Noches en los jardines de España es una pieza musical compuesta por el compositor andaluz Manuel de Falla (1876-1946). En la imagen los Jardines del Generalife.
Música
- El primer movimiento de la obra impresionista Noches en los jardines de España (1909-1915) de Manuel de Falla está ambientada en el Generalife.
- Recuerdos de la Alhambra de Francisco Tárrega es una composición para guitarra también inspirada en esta fortaleza.
- Eduardo Paniagua y El Arabí Serghini grabaron el disco Poemas de la Alhambra (2001) con los poemas de Ibn Zamrak que decoran las paredes y las fuentes de la Alhambra
- En el año 2006 la cantante Loreena McKennitt dio un recital donde cantó canciones de todos sus discos. El recital fue recopilado en un DVD llamado Nights from the Alhambra. El concierto tuvo lugar en la sala de Carlos V.

Estatua de Washington Irving en los jardines de la Alhambra.
Literatura
Ha inspirado a autores como:
- Washington Irving en Cuentos de la Alhambra.
- Francois René de Chateaubriand, con su obra Les aventures du derneier Abencérage.
Otros personajes vinculados a la Alhambra
- Henry Swinburne
- David Roberts
- John Frederick Levis
- Richard Ford
- Teophile Gautier
- James Cavanah Murphy
- Girault de Prange
- Owen Jones
- Jules Goury
- Íñigo López de Mendoza y Quiñones, fue nombrado por los Reyes Católicos, en enero de 1492, alcaide de la Alhambra. Su hijo, segundo conde de Tendilla, impulsó la construcción del palacio de Carlos V. Su familia mantuvo el cargo de alcaide y la residencia en el palacio de Yusuf, hasta el siglo XVIII.
- Maestre Fernando de las Maderas.
- Pedro Machuca, pintor y arquitecto del palacio de Carlos V.
- Julio Aquiles y Alejandro Mayner pintores que decoraron el peinador de la Reina y la sala de las frutas.
- Existe un asteroide del cinturón principal que se llama Alhambra en su honor.

Alhambra, Adolf Seel, 1886.

La Alhambra, Palacio de Carlos V. Obra de Pedro Machuca (Toledo, c. 1490-1550) fue un pintor y arquitecto renacentista español. Su única pero célebre obra de arquitectura es el palacio de Carlos V, un imponente edificio renacentista encargado por el emperador como residencia en la Alhambra de Granada. En 1528 comenzó las obras. En sus trazas se aprecia el contacto con la cultura del arquitecto romano Vitrubio a través de los artistas italianos Rafael, Baldassarre Peruzzi y, sobre todo, Giulio Romano,además de una increíble interpretación y lectura de la arquitectura islámica que sobre la ciudad nazarí se yergue.Un ejemplo de esa lectura es las proporciones utilizadas a la hora de desarrollar el proyecto del palacio donde las más utilizadas son la vara toledana y la raíz de dos... leer más
Palacio de Carlos V

El Palacio de Carlos V de Granada, España es una construcción renacentista situada en la colina de la Alhambra. Desde 1958, es sede del Museo de Bellas Artes de Granada.
Fue mandado construir por el rey Carlos I (emperador del Sacro Imperio Romano Germánico con el nombre de Carlos V) a partir de su boda con Isabel de Portugal, celebrada en Sevilla, en 1526. Tras el enlace, la pareja estuvo viviendo varios meses en la Alhambra, quedando profundamente impresionado por el palacio, dejando encargada la construcción del nuevo palacio con la intención de establecer su residencia en la Alhambra granadina.
Ya los Reyes Católicos habían habilitado salas después de 1492, pero la intención de Carlos era la de dotarse de una residencia estable a la medida de un emperador. El proyecto fue asignado a Pedro Machuca. En una España en la que el estilo imperante era el Plateresco, y que no se había despegado totalmente del Gótico, Machuca construyó un palacio que corresponde estilísticamente al Manierismo, estilo que estaba dando sus primeros pasos en Italia. Aún aceptando las versiones que sitúan a Machuca en los talleres de Miguel Ángel, cuando comienzan las obras del Palacio en 1527 éste no había realizado todavía lo más representativo de su producción arquitectónica.

Palacio de Carlos V, vista de la cubierta y parte de la fachada
Descripción y características. La planta del palacio la conforma un cuadrado de 63 metros de lado con un patio circular inscrito en su interior. Esta disposición, principal rasgo manierista del palacio, no tiene precedentes en la arquitectura del Renacimiento, y sitúa la construcción en lo que se considera la vanguardia artística del momento. El edificio consta de dos niveles: el bajo es de orden toscano completamente almohadillado, en cuyas pilastras se insertan grandes anillas de bronce decoradas. El piso superior es de orden jónico y sus pilastras alternadas con vanos adintelados provistos de frontón. Las dos fachadas principales ostentan sendas portadas de piedra de Sierra Elvira. El patio circular también muestra dos pisos. El inferior está presidido por una columnata dórica de piedra pudinga con un entablamento muy ortodoxo, formado por triglifos y metopas con motivos de guirnaldas y bucráneos. El piso superior lo forma una columnata jónica, más ligera, con entablamento liso. Esta estructura general del patio muestra un claro conocimiento de la arquitectura imperial romana, y se encuadraría en el más puro Renacimiento de no ser por su disposición curva, que provoca en el espectador desconcierto cuando se penetra por sus fachadas principales, y supedita los espacios interiores y escaleras a la idea generatriz. Más tarde Miguel Ángel y Palladio construirán edificios con soluciones análogas, bajo la etiqueta de Manierismo.

Vista del patio del Palacio de Carlos V de Granada
Contexto histórico e influencia. El edificio se implantó en el corazón de la Alhambra musulmana, en un extremo del Patio de los Arrayanes y para su construcción fue preciso derribar un pabellón opuesto a la torre de Comares. Este hecho, que ha sido objeto de crítica y polémica, hay que entenderlo en el contexto de su época: el Palacio de Carlos I no significó tanto la destrucción de parte de la Alhambra como la garantía de supervivencia del resto. En unos tiempos en que lo más habitual era la destrucción total de palacios y templos de los pueblos sometidos, la sensibilidad de los reyes cristianos ante la belleza incontestable de la Alhambra supuso la necesidad de disfrutarla desde dentro y, por ende, de conservarla.
El dominio del lenguaje clásico que demuestra Machuca llega a subvertirlo conscientemente: esto nada tiene que ver con otras obras españolas de la época, en su mayoría fundamentadas en concepciones locales. Su influencia fue muy limitada, por incomprendida: quedarían muchos años hasta que Juan Bautista de Toledo y Juan de Herrera llegaran a las altas cotas de clasicismo de El Escorial.

Palacio de Carlos V de Granada. Panorámica 180º
De Palacio vacío a Museo de Bellas Artes. Desde 1958, el palacio es sede del Museo de Bellas Artes de Granada, que cuenta con piezas singulares como un famoso bodegón de Juan Sánchez Cotán y varios ejemplos de Alonso Cano. La decisión de trasladar aquí el viejo museo, fundado en 1839, se adoptó en 1941 aunque ya se había acordado en 1914.

Bodegón con cardo y zanahorias de Juan Sánchez Cotán. Museo de Bellas Artes de Granada

Cajitas de dulces de Juan van der Hamen y León. 1621. Museo de Bellas Artes de Granada

Tríptico del Gran Capitán esmalte de Limoges. tribuido a a los esmaltadores Penicaud. Museo de Bellas Artes de Granada

La Virgen del Lucero de Alonso Cano, c. 1647. Museo de Bellas Artes de Granada
Tras unas obras de reforma, en enero de 2008 se reabrió el museo...

Museo de Bellas Artes de Granada es la más importante pinacoteca de dicha ciudad, una urbe cuya fama radica más en su patrimonio monumental que en el pictórico. Esto explica el relativo olvido en que ha subsistido esta institución hasta fecha reciente. La institución ocupó el antiguo convento dominico de Santa Cruz la Real, que fue inaugurado en 1839, tratándose en la actualidad de la pinacoteca provincial más antigua de España. Tras diversos cambios de ubicación, desde 1958 tiene su sede en el Palacio de Carlos V, notable edificio del Renacimiento anexo a la Alhambra... Leer más



Termino el trabajo recopilatorio, con estas preciosas vistas de la Alhambra de Granada.
Pues esto es todo amigos, espero que hayáis disfrutado visualizando este trabajo, al igual que yo lo he hecho realizándolo. Sin lugar a dudas: La Alambra de Granada es una maravilla, y el monumento más visitado de España.
Fuentes y agradecimientos: es.wikipedia.org, alhambra-patronato.es, artehistoria.com, arteguias.es, canalphotoshop.com, flickr.com, feminorama.com, megustagranadamegusta.blogspot.com.es, objetivogranada.ideal.es, visitargranada.com, ciceronegranada.com, losbaciares.wordpress.com y otras de Internet